lunes, 7 de noviembre de 2011

X Ruta Coto Musel

Bueno, bueno, al final el tiempo nos respetó durante la carrera y salió incluso el sol para celebrar la décima edición de esta carrera de montaña.

Después del aguacero del sábado la cosa se preveía pasada por agua y fría, así que tocaba camiseta térmica por si las moscas.

Como la carrera es corta, 12.5 km, no tocaba madrugar mucho, así que desayuno con calma y salgo hacia Laviana a recoger el dorsal.

Como coincide con la media maratón de Avilés pienso que no habrá mucha gente, pero cuando llego al polideportivo me doy cuenta de que los corredores de montaña debemos ser como los caracoles, en cuanto llueve todos fuera....al final casi no da de sí el aparcamiento.

Me da tiempo a tomar un cafelito y a hojear la prensa antes de calentar, hoy un poco más de tiempo porque está frío...

Cerca ya de las 11 de la mañana todos en la línea de salida prestos y dispuestos...

Como siempre, la salida a todo trapo...

La única pega para mí de esta carrera es que de los 12.5 km que tiene, los dos primeros y la mayor parte del último son de asfalto y llanos, lo que te hace ir subidito de ritmo y cuando llegan las cuestas se nota...
También hay ciertos tramos intermedios de pista de hormigón en bajada que machaca las piernas, pero bueno, si no se sufre no se disfruta ;)

Salimos de Laviana hacia Canzana, pasando por el Sutu, todos en un pelotón estirado, con un buen ritmo...


Nos metemos ya por un camino paralelo a la carretera, que nos llevará hasta Canzana, tras una primera subidita para relajar los gemelos...

Salimos a la carretera y tras un breve llano volvemos a coger camino hasta Mardana.

Vamos bordeando un valle, entre castaños, por una pista ancha y en buen estado, todavía nada de barro, con un riachuelo a nuestra derecha, que cruzamos antes de enfilar la subida hasta L´Amada.
En esta zona de continuos sube-bajas hay que aprovechar la inercia de las bajadas para coger impulso en los repechos.
Llegamos al avituallamiento y tras una breve parada para tomar algo de agua nos dirigimos hacia la primera bajadona del día, por una pista de hormigón hasta Sarambiello. Está mojado pero las zapatillas agarran bien, así que vamos a darlo todo...

Ya abajo, de nuevo toca subir, cambio de ritmo y al tran-tran, que la subida no es muy larga y luego viene lo bueno, la bajada hacia el pozu Carrio.

Nos avisan de la organización que está bastante resbaladizo y vas ya un poco sugestionado, pero cuando acaba la subida y enfocas cuesta abajo, aunque hay algo de barro, la cosa no está tan mal como la pintan, o eso me pareció a mí, así que a disfrutar del descenso y a tirar.

Ahora viene lo duro (para mí), el último km hasta la meta, asfalto, ligera subida, fuerzas escasas y los que pasé bajando soplándome en la nuca.
Esta parte del recorrido ya la conocía de otras carreras, así que a dosificar y guardar algo por si hay que sprintar en la llegada.
Consigo mantener un ritmo decente y sólo pierdo una posición, casi sobre la línea de meta.
A destacar el detalle de la organización de dar un caldito caliente a la llegada, junto con un par de bollinos (uno con chorizo y otro de queso azul), eso es comida energética y no el aquarius...
Unos estiramientos antes de ducharme y de vuelta a casa.
En cuanto a las sensaciones sobre la carrera: pues es distinta del resto de carreras de montaña que he corrido este año; no discurre por pendientes exageradas, puedes correr casi todo el rato, la distancia te permite exprimirte un poco más sin miedo a desfondarte y no llegar, la mayor parte del recorrido es bastante guapo, tienes algo de "barro" para disfrutar, en fin, otra que será fija en el calendario del año que viene.

En cuanto al trazado, me salión un poco menos de los 12.5 km, probablemente por "acortar" en las curvas ;)