miércoles, 30 de mayo de 2012

IX Subida al Picu Pienzu

Impresionante el día que nos acompañó en esta carrera de montaña, pionera en Asturias.



El día amaneció despejado y ya en Arriondas el Pienzu se dejaba ver entre la poca niebla que quedaba por disipar.



Al otro lado, los Picos nos regalaban una maravillosa vista con gran cantidad de nieve, que fue el tema estrella entre los que intentarán acabar la Travesera de este año.



Como siempre, un gran ambiente antes de la salida, intercambiando impresiones mientras apuramos el café y las madalenas.

En la edición de este año se modifica el trazado en la parte del descenso del picu, para evitar cruces entre los que bajan como aviones y los que suben como pueden. Una gran decisión, no sólo por la seguridad, sino también por la calidad y belleza del nuevo tramo. Para aprovechar el avituallamiento, también se traslada el del Bustacu al collado Beluenzu. A mi gusto quedan muy juntos, ya que están en la base de la última subida al picu, pero tampoco es que el siguiente esté demasiado lejos, así que correcto.



Lo que no cambia este año son las zonas de salida y de meta, ni las ganas de la gente por empezar a correr!!!, así que música a tope, pulsaciones aumentando y motores al rojo vivo, listos para salir...




Como siempre la cabeza de carrera intratable, además hoy hay muchos gallos en este corral, así que la cosa va a estar disputada. Por detrás el resto de los mortales, cada uno con sus estrategias y sus ilusiones; unos intentando mejorar el tiempo del año pasado, otros esperando acabar dentro del tiempo establecido pero todos como chiquillos en el patio de colegio...

Como esta era mi segunda edición, me encuentro en el grupo de los que intentarán mejorar, aunque sólo sea unos segundos, el crono del 2011. El año pasado era un pelín más corta y el calor no castigó tanto. La única duda era el estado de los senderos, por las lluvias de hace unos días.

Salimos y durante dos kilómetros vamos calentando con el asfalto de la carretera que saliendo de Arriondas nos lleva al desvío en el que tocamos por fin tierra!!.

Como no, bajamos el ritmo y metemos las 4x4. Para mi sorpresa no hay mucho barro, aunque sí lo catamos en algunas zonas.

Después de los problemas en el Asturcón mi estrategia va a ser conservadora una vez más, pero esta vez de verdad, nada de forzar al principio. Me tomo con calma las subidas y cuando camino procuro hacer pequeños tramos al trote para no perder demasiado.


Así voy quemando poco a poco kilómetros. Llego al primer avituallamiento bastante fresco y ya empiezo a encontrar "motores sobrecalentados" (pues no les queda nada!!!). La previsión se cumple y el calor va a tener mucho que decir en esta carrera.

Llegamos al Bustacu y ya podemos ver la hilera de hormiguitas que intentan coronar la cumbre del Pienzu, parece tal que la Güestia (o la santa compaña...). Ahora que se ve el picu la cosa es más psicológica, así que no procede acelararse ni intentar alcanzar demasiado rápido la cumbre, poco a poco...


Parada en el avituallamiento, me tomo varios vasos de agua e isotónica y unos cuantos dátiles y pongo rumbo a la "alfombra verde" que me separa de la cima, controlando con el rabillo del ojo a los que ya bajan como aviones. De nuevo un acierto que la bajada del picu esté balizada y separada de la de subida.


En pocos minutos ya consigo coronar, levanto la vista y me permito perder unos segundos para poder disfrutar de la increíble panorámica: al norte el Cantábrico, a derecha Ribadesella, a izquierda Colunga y Lastres y al sur los Picos de Europa.

De momento la maquinaria va bien, las sensaciones son buenas, toca bajar y mucho, así que esta primera rampa me la tomo con calma para no sobrecargar las piernas ni retorcer un tobillo; aún así no me libro de arrastrar el culo por el suelo, pero siendo verde se nota menos...


Ya en la zona nueva aprieto un poco el ritmo y voy alcanzando corredores, con lo que me motivo cada vez más y veo más cerca mi objetivo. La zona es bastante variada y guapa: bajadas por praderas, caminos estrechos y revirados, alguna zona de piedra, algún cruce con riachuelos y zonas de bosque cuya sombra se agradece. Este nuevo tramo nos lleva hasta Cofiño, donde enlaza con el original.

Tras el avituallamiento y a falta de poco más de 5 km para el final la cosa cambia, y de qué manera. Noto un puntazo en la parte externa de la rodilla derecha. Al principio no le doy mayor importancia pero en una zona de bajada pronunciada me falla la pierna y no puedo seguir. Me paro a estirar pero la pierna no responde y tengo que ir bajando a pie. Comienzan a pasarme corredores y ya perdido el objetivo inicial me planteo uno nuevo: TERMINAR.

Me enfado bastante y tras múltiples intentos encuentro una manera de pisar que me permite correr, aunque lento y cojeando. Llego al asfalto y tiro de esta manera hasta la meta. Por fin paso bajo el arco tras 3 horas y 15 minutos, muy lejos de lo que esperaba conseguir.

Me tiro en el prao y tras reponer fuerzas y descargar las piernas con un masaje empiezo a ver la carrera con otros ojos y se me va pasando el enfado poco a poco. Aunque me sigue doliendo ya pienso en la siguiente carrera, que espero pueda disputar.



sábado, 26 de mayo de 2012

101 km solidarios, ¡Si quies, pues!


Otra gran iniciativa de Hector Moro, esta vez destinada a la investigación para la lucha contra el cáncer, en forma de reto que pretende unir Pola de Laviana con la Cueva de Covadonga a lo largo de 101 km.





















El reto solidario se realizará el 3 de junio y consiste en recorrer los 101 km que separan Pola de Laviana de Covadonga, contando una subida y bajada al lago Ercina.

Con esta iniciativa se pretende recaudar fondos para la lucha contra el cáncer, que serán entregados al Instituto Universitario de Oncología del Principado de Asturias (IUOPA).

Hay dos maneras de participar: comprando kilómetros a 5 €/km o haciendo una donación en el "km 0"
  1. Presencialmente en la tienda Zona Boxes (Pola de Laviana)
  2. En el número de cuenta: 0075 0802 12 0700945894 (Banco Popular)
Con el fin de elaborar una lista lo más transparente posible, en el momento de hacer la aportación se facilitarán el nombre, apellidos y DNI de la persona donante.
Más información en el siguiente enlace:

http://elbufalo.blogspot.com.es/p/contacto.html

martes, 22 de mayo de 2012

Vuelta al Monsacro

Este pasado domingo nos animamos a probar una ruta de montaña que ya llevaba tiempo en mi punto de mira, la circular al Monsacro.


Con salida y llegada en Santa Eulalia de Morcín, la ruta rodea al Monsacro a lo largo de unos 21 km con un desnivel acumulado de unos 2.250 m.




Gracias a una despedida de soltera esta vez tengo compañía y ya se va apuntando cada vez más gente a esto de correr por el monte. Al final nos juntamos los tres mosqueteros y un par de canes...



Quedamos a las 9:00 para repasar la ruta y pertrechados con agua y algo para comer (barritas, dátiles y algún gel) salimos para Santa Eulalia.

El día está  muy gris y amenaza lluvia, llevamos chubasqueros pero confiamos en que no descargue sobre nosotros el diluvio del sábado (me acuerdo de algún participante de los 10.000 del soplao y casi que me alegro de no haberme apuntado esta año...).

Empezamos; tomamos la pista que nos lleva hasta Peñanes en constante subida, que nunca viene mal para acabar de despertar. Mucha cháchara y ritmo lento, a lo latino, suavesito mami, que queda mucho camino....



Coronando en Peñanes iniciamos un descenso por caleyas y carreteras, pasando por Rozaes, Villar, Les Vegues y por fin, en el Molín de la puente volvemos a pisar pista y sendero. Ya nos encontramos una buena cantidad de barro que hace juguetona la marcha.


El camino se corta ante una portilla con candado así que toca sacar el plano y decidir. Nos liamos un poco y nos echamos literalmente al monte hasta que la maleza nos hace cambiar de estrategia: ahora a saltar sebes...

Tras atravesar unos cuantos "praos" con sus respectivas sebes y aprovechando los senderos, salimos por fin a la base de la cara sur del Monsacro, en Viapará. Aquí ya no hay pérdida posible y mientras reponemos fuerzas decidimos porqué canal subimos a la zona superior.


Mientras tanto un buen número de buitres nos sobrevuelan. Alguien les ha dejado la comida a pie de senda y el bufette libre está a rebosar. La verdad es que verlos tan de cerca impresiona, porque alguno supera los 2 m de envergadura. Y todo al lado de casa, es lo bueno del Paraíso Natural....



Ascendemos por una de las canales, con el camino bien marcado con pintura azul, y ya arriba decidimos desviarnos y hacer cumbre.




Tras dar de beber a los perros y reponer también nosotros algo de energía, comenzamos a bajar hacia las capillas para luego tomar la pista que nos dejaría en el pueblo de Otura. Ahora, casi todo cuesta abajo, el ritmo se hace más ligero.



Tras cruzarnos con un montón de gente en la parte final del descenso (alguna excursión...) llegamos a Otura y tomamos el sendero que bordeando la escuela de escalada nos llevaría al repetidor de televisión desde el que disfrutamos de unas magníficas vistas de la Foz y de la Puente.



Descendemos rápidamente, aunque con cuidado (el sendero está bastante húmedo y patino un par de veces y no es plan de lesionarse antes del Pienzu), y llegamos a la Collá, desde donde regresamos a Santa Eulalia, ya por carretera. Este tramo se hace algo duro porque las piernas vienen ya algo tocadas y la bajada por el asfalto es larga y bastante empinada.

Llegamos por fin a Santa Eulalia y tras estirar un poco nos desprendemos del magnífico "barro terapéutico" del Monsacro, que te deja la piel como la de un bebé (la piel no sé, pero la sonrisa que se nos quedó sí que era de guaje!!!)


lunes, 14 de mayo de 2012

Avientu Training Camp

Este fin de semana el club Avientu organizó un "training camp" con quedadas para correr por la montaña y unas proyecciones.



A pesar de las previsiones la propuesta me pareció de lo más interesante, por lo menos para poder compartir kilómetros de monte con gente que sólo la puedes ver alejarse de tí a velocidad de la luz en la salida de las carreras.

Mi intención era hacer la del sábado por el Aramo y si me quedaban piernas, la del domingo por Peñamayor. Pero al final sólo se me arregló esta última.

Quedamos a las 9:15 en el polideportivo de Nava. La mañana se presentaba nublada pero no estaba previsto que lloviera, como así fue. La temperatura, buena para correr, ni frío ni calor, así que con la camiseta térmica y el cortavientos en la mochila tomamos la salida 9 madrugadores dominicales. Desde Pola de Siero salían otros 3 fieras que nos encontraríamos antes de la subida a Peñamayor.

El itinerario previsto nos llevó desde Nava a Fuensanta por un sendero con algunas zonas de pista, en algo menos de 3 km. Mucha charla e intercambio de impresiones. A partir de la embotelladora ya afrontamos las primeras cuestas y empezamos a bajar el ritmo de la parpayuela.

Subimos por la pista hormigonada de la derecha, hacia les Praeres y a la fuente Faeu, donde nos reagrupamos y tomamos algo de agua. Un poco más allá del km 6 llegamos al Mayau Pastor donde una bifurcación a la izquierda nos llevaría a las foces del río Pendón. Pero vamos hacia Peñamayor y tomamos la opción de la derecha y de nuevo todo p´arriba.

Como un buen rebaño de cabres tiramos hacia la Varallonga. Pasito a pasito vamos llegando a la cima, donde reponemos fuerzas y reagrupamos antes de bajar, con mucho tiento, porque entre la hierba húmeda y la piedra suelta el riesgo de esguince era más que probable.


Una vez terminada la bajada nos encontramos con los que venían de la Pola (Fuego and company) y todos juntos ya enfilamos hacia las laderas de Peñamayor.



Vamos a atacar el picu por la derecha, siguiendo primero una canalización de agua y luego ya por varias canales que nos llevan hasta la cumbre.


Una vez en la cumbre, de nuevo nos reagrupamos. Un poco de agua y algo de energía y comenzamos el descenso, ahora en dirección noroeste. Descenso este también delicado y no me libro de un par de caídas y de algún arañazo en manos y rodillas, pero nada de importancia.

Retomamos la pista por la que subimos y en el Mayau Pastor nos dirigimos hacia las foces del río Pendón.
Llevamos ya 17 km y las piernas acusan ya el esfuerzo, así que cada uno a su ritmo y ya sin miedo a perdernos vamos dosificando las fuerzas. Nos cruzamos con numerosos senderistas que amablemente se echan a un lado para dejarnos paso. La verdad que tienen que flipar al cruzarse con unos cabras a toda pastilla, cuesta abajo y sin frenos...

El paisaje acojonante, nunca había estado por aquí, pero me prometo venir con más calma para poder disfrutar de las vistas.

De nuevo pasamos por Fuensanta y tras beber en la fuente hacemos el último trecho hasta la zona de salida.

Al final salieron unos 24 km con casi 3000 m de desnivel acumulado.




Un saludo a todos los que compartieron esta experiencia y para la siguiente contad conmigo.

jueves, 3 de mayo de 2012

IX Subida Picu Pienzu

Este año se adelanta la cita de esta carrera de montaña que nos lleva desde Arriondas hasta la cima del Picu Pienzu y como las sensaciones fueron muy buenas, toca repetir.



Organizada por el grupo de montaña Picu Pienzu y el Ayuntamiento de Parres tendrá la salida a las 10:00 en el Parque de la Llera, con la llegada en el Parque de la Concordia (al ladito mismo), tras superar 21 km y 1237 m de desnivel positivo.




Como novedad este año, aparte de la fecha, se modifica el trazado, aumentando en 600 m y reduciendo la longitud del tramo de cruce entre los que vuelven a toda velocidad y los que todavía saborean las subidas a la cruz.

Inscripciones hasta el 25 de mayo, aunque si se hacen antes del 18 sale algo más barata. OJO, sólo 150 plazas !!!.

Más información en:


No os perdáis el vídeo promocional:






miércoles, 2 de mayo de 2012

I Villoria Race 19.5

Nueva carrera a tener en cuenta en el calendario montañero asturiano. Organizada por Héctor Moro de Zona Boxes de Laviana y con parte de la recaudación destinada a la lucha contra el cáncer.


Un poco tocado de la media de Gijón del pasado sábado llego renqueante a Villoria pero con muchas ganas de probar el trazado que nos proponían desde la organización. Al lado de la iglesia ya se estaban ultimando los últimos detalles y la música anunciaba ya una jornada entretenida. No sé yo qué opinarían los del pueblo pero aquello parecía un "after" ;)

Recogida del dorsal y búsqueda de un chigre donde meter las últimas calorías antes de empezar a correr.

Saboreando un té intercambio impresiones con Rafa Peralta sobre la experiencia de los 101 km peregrinos y su visita al Sáhara. Ya tenía los dientes largos y ahora voy rozando las baldosas del bar!!!. El año que viene no me lo pierdo.

Ya en la zona de salida y viendo que la lluvia prevista no nos va a visitar toca protegerse del sol, que sí nos acompañó toda la carrera.

No somos muchos pero casi todos conocidos, parece más una quedada que una carrera, aunque tras el briefing de Héctor y la salida, el ritmo impuesto dice todo lo contrario.


Salimos desde la plaza de la iglesia y nos dirigimos bordeando el río hacia la Corredoria. Pasamos por la salida y de nuevo el mismo recorrido pero esta vez ya nos desviamos por una pista que nos llevará en constante subida hacia las antenas del Cantu Castiello.



De allí descendemos hasta la localidad de la Pumará donde nos espera el primero de los avituallamientos. Tras un breve tramo de carretera y una avituallamiento extra de "Estrella Galicia" y filipinos ofrecido por Rafa, nos dirigimos hacia el área recreativa de la Campa Felguera, tras pasar por una de las zonas más guapas del recorrido que coincide con parte de la Quebrapates de Peña Mea.


Esta vez reponemos algo de sólido con un poco de fruta y varias chocolatinas. Nos anuncian que nos queda un último repecho y luego ya es todo bajada hasta Villoria. Y así es, vamos alternando tramos de pista y senderos embarrados; La bajada es rápida, aunque hay algunas zonas delicadas por el barro y las ramas, pero se hace a buen ritmo.

Cerca de San Pedro de Villoria conectamos con la senda que nos llevará a la línea de meta pero antes del merecido descanso toca dar otra vuelta al pueblo.


* esta foto me recuerda a un comic de Asterix y Obelix: están locos estos romanos.

Esta vuelta es más psicológica que física así que engaño a mis piernas para mantener el ritmo y la posición. Tengo dos perseguidores que me acompañaron en la bajada y consigo cierta ventaja que me permite entrar en meta con tranquilidad con un tiempo de 2:04, más o menos lo esperado y con un muy buen sabor de boca.


Una vez que entraron en meta todos los corredores nos esperaba una espicha para reponer fuerzas y contar las batallitas de la carrera. Entrega de premios y sorteo de unos cuantos regalos de los colaboradores de la prueba.

Resumiendo, carrera muy recomendable por el trazado, la organización, el ambiente y el fin benéfico. No esperes bolsa del corredor con una camiseta superchula o unos avituallamientos tipo buffet 5 estrellas, para eso ya hay otras carreras, en esta vas a disfrutar corriendo por la montaña.